lunes, 22 de octubre de 2012

Cómo lavar correctamente el cabello


Es el gesto básico de cuidado del cabello. Lo repetimos una y mil veces pero nunca lo hacemos igual. Y siempre es conveniente saber cómo se le puede sacar el mejor partido y así potenciar su belleza. Posiblemente nunca te hayas planteado si te lavas bien el cabello o no, y es que, aunque sea un gesto que realizamos muchas veces de un modo mecánico hacerlo sin prestar atención provoca que el cabello pierda resistencia y nutrición.
Para tener buenos resultados al lavarse el cabello, primeramente cepíllalo antes de lavarlo. Empieza en las puntas y sigue en los tallos y el cuero cabelludo. De esta forma los cabellos sueltos se desprenden, se elimina el polvo y los restos de productos capilares adheridos a las cutículas así como se activa la circulación del cuero cabelludo.
A la  hora de lavarlo hazlo con agua tibia. Si el agua está muy caliente las glándulas sebáceas se estimulan y fabrican más sebo. Reparte el champú de forma homogénea. Es más fácil primero viertes el champú entre las manos y después lo depositas en la cabeza con ligeras presiones. Hay que ir añadiendo agua al cabello a la vez que se masajea con la yema de los dedos, nunca con las uñas porque levantarías el cuero cabelludo. Haz movimientos circulares, desde la nuca y pasando por detrás de las orejas hasta las sienes y la frente. Así durante 2 o 3 minutos. Para finaliza aclara bien todo el cabello. Si vives en una zona con aguas muy calcáreas, haz el último aclarado con agua destilada, el cuero cabelludo no se reseca y el pelo queda más suave y brillante.
Recuerda que si te excedes con el champú, el cabello queda áspero y mate. Es mejor aplicar poco champú e ir añadiendo agua durante el lavado para que forme espuma. En las melenas rizadas y abundantes pueden quedar resto de champú. Acláralos con abundante agua y en todas las direcciones, especialmente en la nuca. Y para finalizar, el sebo se fabrica en el cuero cabelludo, que es la zona que hay que trabajar bien. Por lo tanto no hace falta frotar las puntas porque se dañan, ya que se limpian con la espuma que cae al aclarar. ¡CUIDA MUCHO TU CABELLO, TRÁTALO CON CARIÑO!

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