lunes, 22 de octubre de 2012

DRENA TU PIEL


A estas alturas del AÑO nos hemos acostumbrado a lucir un poco más hinchadas de lo normal, algo que cuando empezó el calor veraniego era más notorio.  Muchas veces confundimos la retención de líquidos con una subida de peso o acumulación de grasa, algo que no siempre va de la mano. Los síntomas de la retención de líquidos son sentir el abdomen hinchado (así como las manos, párpados y labios) y piernas y pies cansados.
El organismo funciona manteniendo un equilibrio constante del nivel de líquidos, por lo que el calor en el ambiente provoca que el cuerpo retenga una mayor cantidad de agua, acumulada en los espacios entre las células, para no deshidratarse. La retención provocará un ligero aumento del peso (2-3 kilos) y extenderá considerablemente la celulitis en el caso de las mujeres.
El estrés y la mala alimentación incrementan los niveles de sodio en el cuerpo. La solución es reducir la ingesta de sal, beber agua baja en sodio y evitar alimentos precocinados o embutidos laminados en bandeja (conservados con altas dosis de sodio). Por otro lado, sobra decir que las comidas grasas y las bebidas gaseosas o alcohólicas provocan estas consecuencias en el cuerpo.
Cuanto más agua bebemos, mayor número de toxinas eliminamos de los riñones y mayor expulsión de líquidos. El otro día vi un anuncio televisivo de una marca de agua –que me voy a abstener de aludir- en el que se hacía burla de las aguas “ligeras”. Es cierto que estamos saturados de información sobre lo que es bueno para el organismo, pero lo cierto que es que no es ninguna tontería. Un agua convencional puede tener hasta 25 mg/l de sodio, mientras que otras como Liviana, Bezoya, Bronchales o Monte Pinos rozan el 1 mg/l. Si en verano bebemos mucho agua para paliar la retención, pero tomamos aguas ricas en sodio –como la del anuncio- estamos siendo incongruentes…
Existen alimentos concretos que favorecen la depuración del organismo como el apio, la papaya, la piña, el melón, etc. En mi opinión y según mi experiencia, el mejor diurético es el té verde, que estimula la adrenalina y ayuda a disminuir la asimilación de ciertos nutrientes, como las grasas y el azúcar por medio de la camilina. La mayor eficacia este verano la he obtenido bebiendo litros de té verde y cola caballo o té diurético, provocando la eliminación de líquidos pero sin perder minerales.
La celulitis surge por una acumulación de grasa o de líquido -o de ambas. Se trata de una alteración fisiológica del tejido celular subcutáneo que impide el correcto transporte de alimento y oxígeno a las células. En las mujeres afectadas por celulitis se produce una “salida” de la grasa hacia la dermis y epidermis que no se produce en los hombres.
En contra del mito he de decir que la celulitis sí tiene solución. Cuando hacemos dieta y perdemos grasa lo notamos; si hacemos dietas drenantes en seguida se eliminan las toxinas de la zona afectada. Como para casi todo, una buena alimentación y algo de ejercicio contribuyen enormemente. Por supuesto, también podemos abordar la solución a través de la estética mediante terapias manuales o de aparatología: radiofrecuencia, drenaje linfático, ultrasonidos, cavitación, vacumterapia, bioestimulación, electroestimulación, laser, mesoterapia, presoterapia y un largo etcétera.
Por supuesto las cremas son un gran aliado, siempre y cuando sean buenas marcas. Las cremas anticelulíticas más efectivas son aquellas que contienen extracto de Hibisco y Malvácea, puesto que inhiben la producción de grasa y estimulan la destrucción de los lípidos. También podemos tomar suplementación alimenticia como Ginkgo Biloba o la centella asiática que nos ayudarán enormemente a paliar la celulitis. Mis recomendaciones son: una excelente crema es la de Nu Skin, el Ginkgo de Pharmanex es muy bueno y la centella asiática.

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